Todo el mundo que sigue a Atlético Mineiro de forma
superficial está al tanto de que allí juega uno de los grandes talentos que ha
dado el fútbol en toda la historia. Por supuesto no podríamos estar hablando de
otro que no fuese el ‘Gaúcho’, el gran Ronaldinho. Pero hoy queremos hablar de la otra joya que le acompañaba en ‘el Galo’ y que han formado un ataque de
muchísima calidad.
Bernard Anício Caldeira Duarte (Belo Horizonte, Brasil), más
conocido por todos como Bernard, se ha convertido, con tan solo 20 años en el
quinto jugador brasileño más caro de todos los tiempos, al ser traspasado de
Atlético Mineiro al Shakhtar Donetsk por 25 millones de euros. Su velocidad y
su talento le han llevado a convertirse en una de las perlas del fútbol
brasileño de los últimos años, aunque siempre a la sombra de los Neymar, Oscar
o Lucas Moura.
Estamos ante un extremo diestro que suele jugar por su
banda natural, pero con capacidad de disparo, por lo que en algunas ocasiones
se le puede ver en la posición de segundo punta. En ‘el Galo’ le hemos visto
formando una tripleta de ataque de muchísima calidad junto a Jô Alves y a
Ronaldinho, haciendo que el equipo se proclamase campeón de la Copa
Libertadores este año por primera vez en su historia. A su corta edad ya ha
sido convocado con la absoluta de Brasil, y aunque no sea un jugador titular en
esta selección, ya se ha proclamado campeón de la Copa Confederaciones en este 2013. Estamos delante de una pequeña joya que nos ha dado el fútbol brasileño.
Sobrado de técnica y desborde, no es un jugador llamado a marcar época pero sí
a darnos grandes tardes de fútbol en Europa.
Dentro de las características negativas que podemos
encontrar en este jugador, una de las más destacables se ve a simple vista, y
es su estatura. Estamos hablando de un jugador de 1,60 metros de altura. Por
esta causa fue rechazado dos veces cuando empezó su carrera. Democrata Futebol
Clube fue el primer equipo que le dio una oportunidad seria de jugar al fútbol
en el Campeonato Mineiro. También podríamos señalar que es un jugador que
desaparece en muchos partidos, cosa que aceptamos con los mediapuntas
talentosos que vemos en el fútbol mundial. Pero para un extremo eso no vale.
Necesita más capacidad de trabajo que dar un pase genial, y a este jugador se
le puede ver un poco justo en estos aspectos del juego. Pensamos que estos son
los dos defectos más importantes que podemos encontrar en este jugador, que, aunque como hemos dicho antes, tiene tiempo de sobra para convertirse en un jugador
que marque diferencias en momentos puntuales, creemos que nunca llegará a ser de
primer nivel mundial.
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